De acuerdo con lo informado por BBC News, ayer se reportaron intensos combates en las cercanías de Kiev, la capital de Ucrania. Un reporte de inteligencia británico destacó que una gran columna rusa al norte de la capital se había dispersado, probablemente para apoyar un intento de rodear la ciudad. Entre otras posibles razones, se estimó que también podría ser un intento de Rusia de reducir su vulnerabilidad a los contraataques ucranianos, que han cobrado un número de vidas significativo entre las fuerzas invasoras.
Por su parte, el Servicio de Emergencia del Estado de Ucrania informó que más de 2.000 personas fueron evacuadas en la región de Kiev ayer. Según el comunicado, un convoy de evacuación de 40 autobuses llegó al pueblo de Bilohorodka el sábado por la tarde.
Al sur de la capital, en Vasylkiv, un aeródromo militar ucraniano fue alcanzado por misiles rusos. Se compartieron imágenes que mostraron una columna de humo negro saliendo del lugar y el alcalde informó que además de las explosiones se destruyó la pista y un depósito de combustible.
La situación de las ciudades de Chernihiv, Járkiv, Mariúpol y Sumy también es complicada, ya que se encuentran rodeadas y enfrentan fuertes bombardeos.
Mariúpol, tras dos semanas de bombardeos, cuenta con poco acceso a alimentos, agua y energía, según dijo la ONU. Al norte, en Chernihiv, no hay suministro de agua y partes de la ciudad no tienen electricidad. Mientras tanto, se están estableciendo corredores humanitarios desde Mariúpol, Sumy y pueblos y aldeas a las afueras de la capital.
Sin embargo, los nuevos intentos de evacuar a los civiles de las ciudades sitiadas en Ucrania se ven complicados por los constantes bombardeos rusos, según funcionarios ucranianos.
Números al día
Ante esta situación, el frente diplomático busca lograr un alto al fuego, pero en la llamada entre los líderes francés, alemán y ruso -Emmanuel Macron, Frank-Walter Steinmeier y Vladimir Putin, respectivamente- no se produjo ninguna solución concreta.
El presidente Macron y el canciller Olaf Schulz pidieron un alto el fuego, pero como indicó la oficina de Macron, Vladimir Putin no mostró ninguna voluntad de poner fin a la guerra en Ucrania.
Por su parte, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, dijo en una conferencia de prensa el sábado que alrededor de 1.300 soldados ucranianos han muerto en los primeros 17 días de la invasión rusa. Además, agregó que unos 500 o 600 soldados rusos se rindieron a las fuerzas ucranianas el viernes, mientras que fuentes occidentales estimaron que alrededor de 6.000 soldados rusos también han muerto en ese período.
Páramos ennegrecidos
Lyse Doucet, una corresponsal internacional en jefe de la BBC, se encuentra en la capital de Ucrania y desde allí comunica cómo se desarrolla el conflicto en Kiev. En una nota para BBC News, señaló: “si bien la mayor parte de las fuerzas están a solo 25 kilómetros de distancia, algunas están aún más cerca. Hemos estado reportando sobre lo que ha estado sucediendo en la ciudad de Brovary, 13 km del centro de Kiev”.
Según Doucet, los defensores ucranianos confían y se benefician de la inteligencia de una población local muy patriótica, que lucha con infantería, armas antitanque suministradas por Occidente y con drones para enfrentarse al ataque de las fuerzas rusas. “También escuchamos que los rusos están bloqueados por sus propios problemas: dificultades logísticas y escasez de suministros”, dijo la corresponsal.
Asimismo añadió que, particularmente en el noroeste y el noreste de la capital de Ucrania, se están llevando a cabo intensos combates por el control de los pequeños pueblos, las puertas de entrada a la ciudad, los cuales dejan a su paso grandes franjas de vecindarios que son ahora páramos ennegrecidos.